Las Lentejas

LAS LENTEJAS






- Los Rolling’ son buenos. Estarían bien como teloneros de Héroes del Silencio,-.



¿Le encontráis algún “pero” a esta afirmación? Pues mi familia… sí. Ya, yo tampoco los entiendo, pero son así. ¡Eh! y casi me cuesta el destierro del “clan de los Lora” el día que “solté” tal pensamiento; si no fuese porque ya no hay rincón en el mundo donde acepten mi deportación. En fin, qué le voy hacer si tienen esos dudosos criterios musicales; aunque eso sí, no se puede negar la valentía de mis primos al expresar su osada y demente opinión respecto a la mía (y doy por supuesto que la misma que vosotros,¿verdad?). Razonando un poco, encontré un motivo suficiente como para quererles un poco mas… ¿no creéis?



¿Cuántas veces dudamos en mostrar “nuestras locuras”? Mucho me temo, que el miedo a ser prejuzgados por nuestras opiniones, gustos, necesidades, pensamientos y sobre todo sentimientos, suele acojonarnos más de la cuenta, haciéndonos callar y ocultando nuestro verdadero “yo” en muchas ocasiones ¿me equivoco? Total, un desatino hacia la sensatez…acabamos prejuzgando los posibles prejuicios que pueda formularse otra persona.

Así es la vida… llena de juicios y prejuicios contradictorios.

-¡Bocazas!...fue de las palabras menos agraviantes que escuché aquel día. Tampoco es la primera vez que me han dicho esa palabra, y la de veces que habrán preferido callarla y no decírmela. Lo cierto es que las palabras según de quién vengan son recibidas de una u otra forma, aunque como dijo Bunbury: la apariencia no es sincera”, y las “locuras” no son igualmente interpretadas viniendo de unos genios con tanto ingenio como son Jagger y Bunbury, que dichas por Skyper. Si soy yo quien pregono eso de: sexo, drogas y rock and roll, seguro que tendré en mi vida muchas más puertas cerradas que abiertas, pero si lo hacen ellos la historia cambia….

Así es la vida: tanto tienes…tanto vales.

Tuve mi época de sexo, drogas y rock and roll durante una de mis vidas. Fue en una especie de retiro “no espiritual” en una comuna hippie, en Menorca. Una más de mis tantas historias (a este paso Sabina tendrá que ampliar la canción del “pirata cojo” en honor a mi); y nunca me ha resultado difícil cambiar de una a otra vida, resucitar, reencarnarme o pasar a otro estado de consciencia, que cada quién escoja según sus creencias religiosas (el que las tenga claro). Ya lo decía Bunbury: todo arde si le aplicas la chispa adecuada.

¿Qué podía hacer? si durante muchos años me enfundaba a menudo la camiseta del I Can´t Get No Satifacction (no puedo conseguir ninguna satisfacción). Me despertaba un buen día y como en aquella canción de los Rolling: “Llévame a una estación y ponme en un tren, no tengo expectativas de pasar por aquí otra vez”.

Así es la vida: siempre buscando una fuente para poder respirar (Bunbury).

Ahora, parece ser que soy una especie de bohemio. Aunque la verdad es que pienso como Jagger: Quien puede colocarte un nombre, si cambias con cada nueva ola... Tal vez sea porque al igual que Bunbury : no queda nada sagrado que me divierta ya, que en vez de seguir lemas y emblemas, he decidido cocinar mi plato de lentejas poco a poco, y solo con los ingredientes a mi gusto… ¡Nada de recetas!

¿Que a qué viene eso de las lentejas? Pues muy fácil: Las lentejas cada uno debería cocinarlas a su antojo. Hay quién las prepara añadiéndoles patatas , costilla, chorizo o morcilla. Siguiendo estrictas recetas…sus “satánicas majestades” con el “sexo, drogas y rock”; otros las mezclan con “su majestad divina”; los hay que las aliñan con Tantras, dejándolas en remojo con Mantras; o los que en vez de vinagre le ponen un poco de “ Carpe Diem”. Si llega el momento en el que te aburres o dudas, siempre te queda la alternativa de Ferran Adria, y cerrar el chiringuito por una temporada en busca de nuevas recetas, para reinventarte otra vez antes de que tus lentejas comiencen a ser muy pesadas.

En el fondo, todo son formas de condimentar nuestra vida: lemas, emblemas, dogmas, caminos, zanahorias puestas delante tus ojos en algunos (o en muchos) casos, etc… Lo que me resulta mas jodido de entender, es porque hay tanto debate entre la mejor forma de cocinarlas, cuando la mayoría de esos condimentos son el mismo producto pero con distinta denominación de origen Dicho de otra forma… todos los mensajes son iguales y con un mismo significado, solo que con distintas palabras, distintos idiomas, diferentes formas de explicarlo y entenderlo: realmente lo único importante es conseguir saber que necesitas para tu mejor plato de lentejas.

Y es que la vida es así… como un plato de lentejas, si quieres… COMETELA, y sino mejor… la dejas.

PD: un pequeño consejo culinario… no os canséis nunca de investigar en vuestra particular receta. ¿Conocéis el I+D?